Solo por hoy – Fundación Hogares Bethel
1. Solo por hoy
A veces, en la vida de recuperación, nos sentimos observados por aquellos que comparten nuestro camino. Sabemos que nuestros compañeros en Narcóticos Anónimos están al tanto de muchos aspectos de nuestras vidas. Quizás no nos guste, pero es una realidad que no podemos evitar. Si tratamos de aislarnos para evitar los comentarios de los demás, también nos perderemos el apoyo, el cariño y la experiencia que esta comunidad nos ofrece. La clave está en vivir de acuerdo con nuestros principios, con seguridad en nuestro propio proceso y en la guía de un poder superior. Al final del día, lo más importante es nuestro compromiso con la recuperación, y eso no debe verse afectado por lo que piensen los demás. Compromiso diario: Hoy participaré activamente en la confraternidad de NA y no permitiré que las opiniones ajenas influyan en mi compromiso.
2. Consejería terapéutica
Es normal sentirnos incómodos con lo que otros puedan decir o pensar de nosotros. En un grupo como Narcóticos Anónimos, donde compartimos tanto de nuestras vidas, puede surgir la sensación de estar en el centro de la atención. Sin embargo, es importante recordar que la base de la recuperación radica en nuestro bienestar, no en las opiniones de los demás. El aislamiento puede ser tentador, pero al alejarnos perdemos la oportunidad de recibir apoyo y orientación. Lo ideal es fortalecer la confianza en nuestras decisiones y en el camino que estamos siguiendo. Con el tiempo, esos comentarios externos se vuelven irrelevantes cuando nuestro enfoque está en nuestro propio crecimiento y bienestar.
3. Consejería espiritual
A veces sentimos que los ojos de los demás están puestos sobre nosotros, y eso puede ser abrumador. Sin embargo, en esos momentos, es esencial recordar que Dios nos ha llamado a vivir de acuerdo con principios que nos fortalecen. No podemos controlar lo que los demás piensen o digan, pero sí podemos fortalecer nuestra relación con Dios, buscando su guía y su paz en cada paso de nuestro proceso de recuperación. Al confiar en su bondad y dirección, encontraremos la serenidad necesaria para seguir adelante sin que las opiniones ajenas nos afecten.
4. Dios te habla
Hijo, sé que a veces te sientes expuesto, que los comentarios de otros pueden hacerte dudar o sentir incomodidad. Pero quiero que sepas que te estoy guiando en este camino de sanación. No necesitas preocuparte por lo que los demás piensen de ti, pues yo soy tu guía y tu fortaleza. Sigue viviendo de acuerdo a los principios que has aprendido, confía en que estoy contigo y que cada paso que das está bajo mi cuidado. Mi amor es más grande que cualquier palabra o juicio. Aférrate a mí y te daré la paz que necesitas.